¿Cuánto cuesta tener una vivienda vacía cada año que pasa?
Ante el miedo de alquilar tu vivienda y encontrarte con inquilinos morosos, muchos propietarios optan por no alquilar la misma. Sin embargo, esta decisión no es gratuita, pues debemos tener en cuenta cuánto cuesta tener una vivienda vacía cada año que pasa.
Por tal motivo, en este artículo, recopilamos los principales gastos a los que se enfrentan los propietarios que deciden tener una vivienda vacía, sin alquilar, de cara a poder calcular cuánto cuesta tener una vivienda vacía.
De manera general, y por término medio, el coste que supone tener una vivienda vacía cada año varía entre los 1.800 y 2.300 euros al año.
Veamos qué partidas de gastos son la que componen este montante.
Gastos a pagar en una vivienda vacía
Los principales gastos a los que han de hacer frente los propietarios de viviendas vacías son:
1.- Gastos de comunidad: es la partida de gasto más elevada que deben asumir. Ronda de media los 634 euros anuales por comunidad, que varía dependiendo de los servicios que cada comunidad tenga contratados. A ello hay que sumarle los gastos imprevistos por derramas.
2.- Suministros (luz, agua y gas): independiente del consumo que se haga o no, el mantenimiento de estos servicios contratados se debe continuar abonando.
- El mantenimiento del agua supone de media 216 euros al año.
- Por su parte el gasto de la luz y gas también varíará en función de si se tiene el contador en alquiler o en propiedad. Por término medio, en el caso de luz, para una potencia de 4,4Kw contratados, supone un gasto anual de 185 euros y en el caso del gas, unos 105 euros.
Otro vía para pagar menos suministros por tener una vivienda vacía es dar de baja su contratación, pero esto también tiene su contrapartida en caso de querer volver a contratarlos.
3.- Impuestos anuales: dentro de éstos, hay que diferenciar las siguientes partidas:
- IBI: la media a pagar por este impuesto es de 276 euros al año, valor que depende del valor catastral de la vivienda y del propio municipio en el que se ubique.
- IRPF: debemos imputar estos inmuebles urbanos como rentas inmobiliarias, cuando no sean la vivienda habitual o se estén vinculados a actividades económicas o arrendados. Se imputará entre el 1,1% o el 2% del valor catastral de la vivienda, dependiendo de si su el valor ha sido revisado en el mismo ejercicio o en los 10 anteriores para el 1,1% o hace más de 10 años para el caso del 2%.
4.- Seguro: el gasto medio de la prima de seguros es de unos 215 euros al año. No todas las viviendas tienen contratados seguros, de hecho, según últimos estudios, en España hay unos 7 millones de viviendas sin asegurar. Éstas, en caso de imprevistos, deberán hacer frente al montante que supone el arreglo de los siniestros ocasionados tanto en la propia vivienda como los daños causados a vecinos.
5.- Reparaciones: la última partida a considerar son aquellos gastos a asumir por desperfectos derivados del no uso de la vivienda y que no están incluidos en el seguro, como por ejemplo atascos o pintura. Éstos se estiman en unos 300 euros de media al año.
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